Al Filo de La Verdad

¿Celebrar, qué? por Giovanni Cegarra

Aunque algunos lo harán en la medida de lo que puedan, para no perder la lógica costumbre, este miércoles primero de mayo, Día Internacional del Trabajador, sumidos en un debilitamiento económico que se siente, a la vuelta de la esquina, en todos lados, la pregunta generalizada, sin caernos a embustes es ¿celebrar, ¿qué?, fecha que otrora era toda una gran fiesta popular de la que se disfrutaba, a todo dar y hoy, imposible.

 

No pecamos de desalentadores pero es la realidad que se palpa, en una ciudad como Mérida, municipio Libertador del estado Mérida, en la que cada día se agudiza el bajón comercial, empleados públicos y privados devengan ínfimo salario que no alcanza para nada, lo poco que se percibe debe estirarse al grado extremo, para poder alcanzar a comprar algo para el sustento familiar, ante los elevados costos de los productos que se disparan cada día con el cuento de la cotización del dólar, sin olvidar la penuria por la deficiencia de los servicios públicos, etc. etc. etc.

 

Todo un primero de mayo, de paso atravesado, que pasará sin pena ni gloria, no hay duda de ello, “la masa no está para bollos” me comentó uno por ahí, lo del codiciado aumento salarial, no huele por ningún lado, a lo mejor ya publicada la presente entrega se sepa, si es que se da; se darán marchas propias de la Isla de La Fantasía y por eso, duela a quien le duela, caiga a quien le caiga, al que le caiga el guante que se lo plante “, ¿celebrar, qué? y punto.