Mérida, Julio Martes 15, 2025, 02:44 am
Por quinto año consecutivo, Venezuela no reporta datos sobre donación voluntaria de sangre a la OPS, lo que impide cubrir la demanda nacional.
Venezuela fue la única nación de Latinoamérica y el Caribe que no entregó cifras oficiales sobre donación voluntaria de sangre a la Organización Panamericana de la Salud (OPS) en 2024. Por quinto año consecutivo, el país se mantiene ausente del informe anual presentado el 14 de junio, Día Mundial de la Donación de Sangre.
En contraste, la región recolectó 9,2 millones de unidades de sangre en 2023, con un aumento del 15,5 % respecto a 2020. Sin embargo, Venezuela no aparece reflejada, lo que impide medir su avance y evaluar el estado real de su sistema de donación.
Expertos advierten que esta opacidad estadística obstaculiza la planificación de campañas, impide conocer el déficit real y limita la capacidad del sistema de salud para responder a emergencias. Según estimaciones médicas, se necesitan al menos 60.000 unidades de sangre por cada millón de habitantes al año para cubrir la demanda nacional.
Cae la donación voluntaria y faltan insumos
En 2024, apenas 1 de cada 100 venezolanos dona sangre de forma voluntaria, una caída drástica comparada con años anteriores. De acuerdo con el Banco de Sangre del Grupo Médico Santa Paula, esta cifra representa una disminución del 5 % al 1 % en solo un año.
Raiza García, expresidenta de la Sociedad Venezolana de Hematología, explicó que el país requiere entre 3 % y 5 % de la población donante para cubrir las necesidades. Esto implica al menos siete donaciones por cama hospitalaria al año. Sin embargo, el número de donantes voluntarios cayó 82 % entre 2018 y 2021.
Además de la falta de campañas, los bancos de sangre enfrentan graves deficiencias. La Encuesta Nacional de Hospitales reportó en junio que 27 % de estos centros no tiene insumos para realizar las pruebas de detección de enfermedades. Sin reactivos, no hay sangre segura.
Por lo tanto, la falta de cifras, insumos y cultura de donación mantiene a Venezuela rezagada. Mientras tanto, miles de pacientes siguen dependiendo de transfusiones que, en muchos casos, no llegan a tiempo.
Con información de El Nacionalista